2006-06-27

Cardo Fashion Weekend, una acción poética

Antecedentes

Cuando surgen centellas en los ojos de Iván Buenader hay que aferrarse de un poste con uñas y dientes, o agenciarse una buena ancla de esas capaces de enchufarse a los abismos; es un vendaval que barre árboles, casas y trenes y los lleva varios kilómetros delante de sí mismos.

Me ha llevado varios años de acecho comprender a cabalidad la poética de Buenader. Estoy segura que se tardará mucho tiempo en agotar los múltiples lenguajes, símbolos y mensajes que desencadena, sin embargo, siendo una de sus primeras lectoras asiduas, espero aportar algunos elementos para desentrañarlo. Desde que escuché sus primeros textos supe que con ese ritmo habría que andarse con cuidado. Tres o cuatro meses después de estarlo leyendo, viendo y escuchando con mucha atención, empecé a vislumbrar algunas vetas de poesía experimental, influencia de una estética cibernética, y un alma absolutamente inquieta y apasionadamente cerebral. Pero, repito, hay que andarse con cuidado. Cuando ya se ha establecido una forma de leerlo, se escabulle. Ya está inventando otra poética, moviéndose por la superficie de lo impredecible. Más tarde me sonaron los ecos de aquella célebre Semana de Arte de Brasil en 1922 y la vanguardia que desencadenó. Al revisar el poema ahora tal vez nunca* hecho con formas geométricas que Décio Pignareti escribió en 1964 encontré ciertas claves para comprender el porqué resulta indescifrablemente conmovedora la poética de Buenader. Encuentro en él, varios elementos del estado de ánimo que llevó a aquellos poetas por una conciencia crítica multiforme: contacto con nuevas herramientas de escritura, un lenguaje visual emergente (en el caso actual videografías y audiografías cibernéticas, DVD, CD, MP3, Internet, Chat, scanner y un gran etcétera), hastío de las formas establecidas, conciencia de los lectores cada vez más veloces, más impacientes, más directos; hasta aquí empieza a ser comprensible porqué el verso libre no alcanza a contenerlo. Después, una onda del eco del ‘47 me pegó en plena nuca: Jackson Pollock.

Resumir el arte de Pollock (action-painting o dripping), como: consistente en derramar, dejar gotear o lanzar pintura sobre lienzos sin tensar, sería tan equivocado como decir que la poética de Iván Buenader es reunir las diferentes expresiones del siglo XXI en un collage posmoderno que pasa por los famosos performances. Del mismo modo que Pollock, la propuesta de Iván involucra todo el cuerpo, por eso me concreto en llamarlo Poeta Total (como llamaron alguna vez a los brasileños) y Acción Poética a los actos-poema que realiza recogiendo cierta reverberación del concepto de la Experiencia Poética tratada por Octavio Paz en El arco y la lira.

Cardo Fashion Weekend

Es dentro de esta propuesta estética que catalogo el Poema Total Cardo Fashion Weekend. Cansado de la superficie social y de la superficie literaria, las reúne para recorrerlas como si se tratara de la ignota arena de las profundidades abisales. Pero para comprenderla no le bastan las palabras. O dicho de otra manera, convierte en personas a las palabras para diseccionarlas con la misma acuciosidad de un científico. Cada palabra es una persona que conoce, o cada persona que conoce es una palabra que pone y quita, desnuda y viste como necesita para poder comprender en cuerpo, lo que piensa en signo y convertir en signo lo que sabe cuerpo. Ese es el triple salto mortal que en el momento decisivo de su oficio todo poeta que se respete debe saber ejecutar con gracia para salvar la distancia que separa a la carne del concepto. De esa eternidad suspendido en el aire los giros buscando vertical es de donde saca el poeta la certeza que acompaña a todo poema. De ese manantial surgió Cardo Fashion Weekend, a él las palabras acudieron como corderos desnudos a beber y mostrarse para que los espectadores-lectores podamos comprender una máscara que nos revela el rostro de la humanidad en el naciente siglo XXI. Hay que resaltar la generosidad con que estas palabras-poeta-modelo acudieron a posar para el poema. Pero también la habilidad del poeta para seducirlas y ordenarlas de tal modo que pudieran decir juntas, más de lo que dicen separadas.

Las herramientas

Para desarrollar su acción poética, Iván Buenader echó mano de un recurso utilizado al principio de los años ´90 por varias encueratrices y después por actrices y actores o autores famosos: el calendario anual acompañado mes a mes de fotografías de diferentes aspectos o ángulos del modelo. Sólo que, para a este calendario añadió poemas y eligió sólo poetas, escritores o artistas para fotografiar su comportamiento si tuvieran las mismas condiciones de los modelos de los tradicionales desfiles y eventos de moda del gran mundo: Transporte, alimentación, alojamiento y diversión. Sobre todo diversión pues en la propuesta estética de Buenader, el sentido del humor, la ironía y el sarcasmo, son fundamentales. El calendario del Cardo Fashion Weekend es el primero de los poemas surgido de ese acto, el mensaje es responsabilidad de Iván Buenader la lectura, es responsabilidad de usted.

Raquel Olvera
22 de junio de 2006

4 Comments:

Anonymous Anónimo said...

me gustaría saber por qué este montón de palabras que no significan nada

12:20 a.m.  
Anonymous Anónimo said...

observe lo que dice cansado de la superficie social y de la superficie literaria bla bla bla entonces echó mano de un recurso utilizado en los años 90 con las encueratrices apoco eso es muy profundo o intelectual esto es puro choro para hacerse los interesantes y con razón nadie les ha comentado nada desde 2006 más bien parece unaborracheradeweekend.blogspot raquel parece que le atizas a la mota

12:30 a.m.  
Anonymous Anónimo said...

y como decía mi abuela se nace con el talento no es tizne que se recoge

12:43 a.m.  
Anonymous Anónimo said...

Llamar "Slim" al pene de tu novio porque es asquerosamente rico.

Eso es romanticismo señoras, no sus poemas cursis y estados de Facebook.

7:04 p.m.  

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